Los riesgos del link building salvaje
Todos sabemos que los enlaces a tu web son fundamentales para cualquier web, ya sea como parte de tu estrategia SEO o como una manera de lograr visitas por referencia directa desde otras webs. Sin embargo, llevados por este concepto, muchas empresas se lanzan a estrategias de link building muy agresivas orientadas a disparar su posición en los rankings de Google.
Estas prácticas de link building a gran escala conllevan riesgos considerables: recibir una importante penalización por parte de Google, que puede pasar factura a nuestro negocio durante meses o años.
Entre las prácticas que Google intenta detectar y penalizar destacan los enlaces pagados, los intercambios excesivos de enlaces, los anuncios que transfieren PageRank (es decir, que no usan mecanismos como la etiqueta rel="nofollow") o, por supuesto, los vínculos no naturales, como los que a veces podemos encontrar en plugins y plantillas gratuitas para sistemas de publicación como WordPress.
He compartido esta página en Slideshare con las principales ideas alrededor de este asunto:
Va en serio: el link building "a lo bestia" tiene consecuencias
Me resulta llamativo que el link building asilvestrado siga siendo un recurso popular en tantas organizaciones puesto que, desde 2012, Google está anunciando las distintas versiones de sus actualizaciones Penguin, orientadas específicamente a combatir este tipo de actividades para alterar los resultados del buscador. Ya mencioné el otro día el caso del castañazo que se dio eDreams en la Bolsa tras sufrir una penalización por parte de Google. Tampoco cabe aducir desconocimiento, porque las directrices de calidad de Google están bien claras.
¿Acaso no debo trabajar para conseguir enlaces?
Nada de esto significa que no debas preocuparte por conseguir enlaces a tus contenidos, ni mucho menos. Los enlaces que ocurren de forma natural son oro puro: ocurren porque a tus usuarios les interesa tu contenido, lo comparten, hablan de él, lo reutilizan, etc. Tampoco debes dejar de animar a tus usuarios a compartirlos o a enlazarlos, siempre que no trates de construir una máquina de generar vínculos, sino que aproveches el entusiasmo que causas en ellos. Ni debes evitar aprovechar todas las herramientas de marketing que tienes a tu alcance para lograr esos enlaces y ese tráfico. Tan solo debes parar cuando sientas que estás pisando terreno pantanoso y, sobre todo, cuando creas que lo que haces no le aporta valor real a tus clientes.