Consejos ESENCIALES para tus emails de autocandidatura
Por mi trabajo, gestiono varias direcciones de email genéricas de contacto. En ellas, recibo a diario un buen número de mensajes de autocandidatura de personas, principalmente jóvenes, en busca de empleo. La mayoría de esos mensajes son, desgraciadamente, lamentables. Trataré de resumir una serie de pistas para multiplicar las probabilidades de éxito de tus emails de autocandidatura.
Cuando empecé a escribir este artículo, lo consideraba un off-topic. Sin embargo, pronto caí en la cuenta de que no era así: nada hay más relacionado con el marketing que el marketing de uno mismo, como candidato, durante la búsqueda de trabajo. Al buscar empleo, somos marcas en busca de consumidores y, como tales, un mal email de autocandidatura es una oportunidad desaprovechada (¡perdida!) de impactar a nuestro cliente. Recuerda que no hay una segunda oportunidad de causar una buena primera impresión.
Por qué hay que cuidar más los emails de autocandidatura
Recuerda que, cuando envías tu CV a una empresa sin contestar a ninguna oferta específica, estás echando las redes en un gigantesco océano en el que ni siquiera sabes si hay peces. Así que más te vale que tu red sea grande y esté bien tejida porque, de lo contrario, lo más probable es que ni abran tu mensaje de autocandidatura. Ponte en el papel de quien recibe ese email: cada día, le llegan docenas (o incluso cientos) de mensajes de candidatos en busca de empleo; tiene poco tiempo y muchas cosas que hacer, así que no puede dedicar tres minutos a averiguar quién eres, qué sabes hacer o en qué ciudad vives. Normalmente, esa persona no gestiona los procesos de selección, sólo decide si borra tu mensaje o se lo envía a alguien a quien pueda interesar: pónselo fácil.
Manos a la obra
Así que, tras ver un montón de esos mensajes de autocandidatura escritos sin cariño alguno, he recopilado los principales errores que los candidatos suelen cometer en ellos y cómo evitarlos para maximizar las probabilidades de que tus emails hagan su trabajo con eficacia. Sin ningún orden en particular:
El asunto es la clave. Da igual lo genial que sea tu currículum o lo bien que encajes en una vacante actual de la empresa: si no abren tu mensaje, no sirve de nada. No malgastes ese limitado y valioso espacio con cosas como tu nombre, que ya aparece en el el "De:" de tu mensaje. Tampoco frases vacías como "A la atención de RRHH" (si es un CV, no se lo van a reenviar a los de logística, ¿no?). Incluye la descripción de tu perfil y, si se aplica, tu ciudad de residencia o en la que buscas trabajo. Algo como "CV Analista/Programador .NET Azure - Barcelona y alrededores".
No pienses sólo en el día de hoy. Si tu email de autocandidatura no encaja en ese momento, es probable que sea borrado. Sin embargo, puede que, simplemente, sea ignorado pero quien lo ha recibido lo deje en su programa de correo electrónico. Piensa como un SEO: asegúrate de que tu mensaje contiene, en el asunto o en el cuerpo del mensaje, las expresiones por las que te interesaría que te encuentren si, días más tarde, esa persona hace una búsqueda en su bandeja de entrada.
Debes dedicar las dos primeras líneas de tu mensaje a complementar la información que das en el asunto. Aprovecha para incluir cosas como tu puesto actual o más reciente, los años totales de experiencia relevante, tu titulación y cualquier otra cosa (cursos, certificaciones) que resulte de interés en tu sector. También, aprovecha para aclarar otras cuestiones como las ciudades en las que puedes trabajar, el tipo de puesto que buscas o tu disponibilidad. En dos líneas, recuerda: es tu elevator pitch laboral.
A continuación de esas dos primeras líneas, incluye en forma de viñetas los datos más relevantes de tu experiencia laboral. No te extiendas, sé esquemático ("2 años como técnico de marketing en Nosédónde; 3 años como responsable de patrocinios en Noséquéotra").
Si tienes un (buen) perfil en LinkedIn o cualquier otra presencia online que merezca la pena ver, incluye el vínculo en el cuerpo del mensaje, no sólo en el CV.
Cuida la ortografía y tu manera de expresarte. La mayoría (sí, la mayoría) de los emails de autocandidatura parecen estar escritos en Klingon. Intenta ser de los pocos que no.
Huye de expresiones vacías como "con ganas de aprender" o "trabajador y atento a los detalles". Nadie te va a creer sólo porque lo digas y estás perdiendo un tiempo y espacio preciosos en un mensaje de correo electrónico.
Nunca envíes un mensaje a varias direcciones de empresas distintas poniéndolas en la línea "Para" o "CC". No sólo ayudas a contribuir al spam y la propagación de virus sino que, además, transmites la sensación de que esto es sólo un trámite para ti. Lo ideal es un mensaje para cada empresa pero, si son demasiadas, asegúrate de usar la copia oculta, "BCC" o "CCO".
Y, si ya has redactado un mensaje de autocandidatura como es debido, asegúrate de que tu CV también está a la altura. Pero eso ya se lo dejo a otros que seguro saben más que yo del tema.