10 consejos para afrontar el examen del PMP
Esta mañana, me he presentado al examen del PMP y, afortunadamente, lo he aprobado.
Ahora que puedo darlo por cerrado, me apetece compartir con vosotros mis lecciones aprendidas de este proyecto, por si a alguien le resultan de utilidad.
Algunos de estos consejos los puse en práctica y funcionaron. Otros son el resultado de analizar mis errores en el proceso. No van en ningún orden concreto:
Cuando decidas presentarte al examen del PMP, procura no darle mucha publicidad. Si la decisión despierta la aprobación y la admiración de los demás, recibirás muchos estímulos positivos que te harán bajar la guardia y relajarte. Lo mejor que puedes hacer es tomar la decisión, planificarte el estudio, poner una fecha para tu examen y tratar de ceñirte a ese plan inicial (vamos, como si fuera un proyecto “real”… ¡es que es un proyecto real!). Si te relajas y lo vas postergando, puede llegar a convertirse en una losa pesada en lugar de un reto apasionante.
Si dominas el inglés, elige hacer el examen en ese idioma y estudia también en inglés.Hay muchísimos más recursos en inglés que en castellano.
Hazte miembro del PMI. Tienes que pagar una cuota, sí, pero la recuperas con la reducción que supone en las tasas de examen. Así, tendrás acceso a multitud de recursos de su web (libros, artículos, el PMBOK, etc.).
Yo me compré un kit llamado “PMP: Project Management Professional Certification Kit“, por Kim Heldman. Sinceramente, me han sobrado dos de los tres libros que en él vienen. He usado el que se llama Review Guide, que es una especie de resumen del grande, como guía para orientarme en el estudio pero me he centrado en la especificación del PMBOk. Actualización: cuidado, asegúrate de que los materiales que uses estén actualizados a la versión actual del PMBoK.
Casi todo lo relacionado con Responsabilidad Profesional es un regalo llegado el examen. Recuerda leerte el Código ético del PMI y, para el resto de preguntas, aplica una regla muy simple: la respuesta correcta es la más honesta, legal y, en definitiva, ética de las cuatro. Qué curioso: así debería ser siempre en la vida.
No te asustes con las fórmulas relacionadas con Earned Value Management. No son tantas ni hay tantas preguntas en el examen en que vayan a aparecer. Lo importante no es memorizar la fórmula, sino entender la teoría que hay detrás. Conociendo los conceptos, las fórmulas son evidentes.
Más sobre las fórmulas: en el examen, hay algunas preguntas que parece que te obligan a aplicar fórmulas y a hacer cálculos pero que, en realidad, puedes contestar sin hacer operación alguna. Se trata de casos en los que, dado el enunciado, sólo uno de los resultados es posible (por ejemplo, porque es el único negativo, el único mayor que 1, etc.).
Haz muchos tests. Ayuda a prepararte para el día de la verdad.
Si te atoras en alguna pregunta, prueba a hacerle un análisis pre-mortem: suponiendo que ya la he fallado, ¿qué hay en la respuesta que he elegido que la hace incorrecta? Es una forma de razonar contigo mismo la idoneidad de cada respuesta posible.
Estudia, estudia, estudia. Hay gente que hace cursos de preparación (yo no he hecho), otros se compran muchos libros, otros… da igual lo que hagas, no podrás evitar tener que estudiar de forma bastante seria durante unas cuantas semanas.
En cualquier caso, si reúnes los requisitos para presentarte al examen del PMP y crees que te merece la pena el esfuerzo, no lo dudes: HAZLO.